Historia

Como Empezaron las Computadoras

La Gente Aprende A Contar

La Gente Enseña A Las Máquinas A Contar

La Máquina de Diferencias

La Máquina Analítica

Calculadoras Mecánicas

Lógica Algebráica Booleana

La Electricidad y el Teléfono

Calculadoras Eléctricas

Máquinas Tabuladoras

La Era de la Tarjeta Perforada


La Gente Aprende A Contar

     El primer ser humano en registrar números en un medio muy bien pudo haber sido un contable de Sumeria en algún lugar del valle del río en baja Mesopotamia alrededor de 3200 B.C. usando el sistema numérico sexagesimal basado en los números 6 y 10; esto es en la base 60.  El descubrimiento de la aritmética en Sumeria trajo beneficios tangibles como la habilidad de modelar numéricamente la producción de su economía; y así su comercio creció haciendo de Mesopotamia la cuna de la civilización occidental.

     El primer instrumento computacional conocido es el ÁBACO, que fue inventado por los Chinos y que ha estado en uso por más de 3,000 años.  Consiste de un marco con una serie de cuentecillas en alambres paralelos.  El usuario mueve las cuentecillas en los alambres para realizar todas las operaciones aritméticas básicas de acuerdo a una serie de reglas complejas que el humano debe memorizar y ejecutar.

     El término COMPUTADORA fue usado por primera vez para referirse a humanos que realizan cómputos.




La Gente Enseña A Las Máquinas A Contar

     La primera MÁQUINA PARA COMPUTAR automáticamente fue creada por Blaise Pascal en 1642.  Diseñada sólo para sumar números para propósitos de información sobre impuestos, trabajaba cuando el usuario movía unas esferas que activaban los mecanismos calculadores de la máquina.  Se le conocía cariñosamente como PASCALINA

     En 1671, Gottfried Wilhelm von Leibniz inventó una máquina capaz tanto de sumar como de multiplicar, lo cual era realizado sumando los números y entonces moviéndose para la próxima suma.  El mecanismo de engranajes escalonados introducido por Leibniz en 1694 ha seguido en uso hasta el siglo 20.

     En 1812, Charles Babbage, trabajando como profesor de matemática en la Universidad de Cambridge, Inglaterra adelantó la idea de un artefacto mecánico que calculara automáticamente.  Babbage se dió cuenta que cuando los humanos calculamos, aún los problemas matemáticos más complejos, el proceso puede subdividirse en rutinas cortas que potencialmente una máquina pueda realizar.

La Máquina de Diferencias

     Charles Babbage razonó que al automatizar el cómputo de rutinas cortas, los problemas más complejos podrían ser resueltos con mayor rapidez y exactitud y menor esfuerzo por una máquina que por los humanos.

     Para 1822, luego de diez años trabajando en este concepto, Babbage comenzó el diseño de una máquina que calculaba automáticamente, la cual llamó MÁQUINA DE DIFERENCIAS.  Para 1822, ya había construído un pequeño modelo para demostración.

     Luego de obtener asistencia económica del gobierno británico, Babbage comenzó la construcción a gran escala de la máquina de diferencias en 1823.  Fue diseñada para ser movida por vapor y "automáticamente" tanto calcular como imprimir tablas de resultados.  Era controlada por un programa de instrucciones fijas ejecutadas solamente en una secuencia lineal precisa.  Esta máquina de diferencias, aunque de utilidad práctica limitada, fue un gran avance conceptual.

La Máquina Analítica

     Babbage continuó trabajando en su máquina de diferencias por diez años completos, pero en 1833 perdió interés porque tuvo una "mejor idea".

     Su nueva idea fue la contrucción de una computadora de propósito general, totalmente programable.  Babbage llamó esta máquina la MÁQUINA ANALÍTICA.  El diseño de Babbage para este artefacto especificaba una computadora decimal en paralelo operando con números (células-'words') de 50 dígitos decimales.  Este artefacto tenía la capacidad de almacenamiento (memoria) para 1,000 de esos números.

     La Máquina Analítica usaba tarjetas perforadas y operaba "automáticamente" impulsada por vapor.  Requería un sólo operador y realizaba cómputos aritméticos.  La Máquina Analítica de Babbage nunca fue completada, pero fue el primer modelo realista de la computadora moderna.  Sin embargo, el sueño de una computadora programable de propósito general desapareció por cerca de 100 años.

Calculadoras Mecánicas

     Después de Babbage se perdió el interés en "máquinas contadoras automáticas" tanto comercialmente como académicamente, pero el interés resurgió basado en los prototipos construídos por Leibniz y Pascal en el siglo 17.  Aún mientras Babbage trabajaba en su "Máquina de Diferencias" en 1820, los primeros productos comerciales fueron contruídos utilizando los conceptos de Leibniz y Pascal.

     En 1820, Charles Xavier Thomas (Tomás de Colmar) desarrolló la primera calculadora mecánica de escritorio con propósitos comerciales.  Era capaz de sumar, restar, multiplicar y dividir. Se le llamaba "aritmómetro".

     Alrededor de 1848, George Boole, un matemático Inglés concibió el conjunto básico de postulados (reglas) describiendo las aseveraciones lógicas cierto/falso, y estableció éstos en términos algebráicos, conocidos hoy en día como Álgebra Booleana, ó Álgebra Digital, con la cual manipular variables de entrada ó salida en binario (0/1).

Lógica Algebráica Booleana

     El Álgebra Booleana que manipula las relaciones Y, Ó, y NO es la que habilita el análisis y diseño de sistemas computadorizados digitales prácticos, aunque no sería hasta 1938 que los importantes descubrimientos de Boole se convirtieran en el fundamento de los circuitos lógicos de todas las computadoras modernas.

La Electricidad y el Teléfono

     En 1883, Thomas Alva Edison descubrió la conducción electrónica, que hizo posible la electricidad.  En 1888, Heinrich Hertz descubrió las ondas radiales.  La Electricidad vino a ser la clave de la revolución en la electrónica y en las comunicaciones.

     La compañía Westinghouse Manufacturing Company, fundada por George Westinghouse, instaló el primer sistema de energía eléctrica utilizando corriente alterna (AC) en 1886 y batalló para que se estableciera ésta como el estándar en vez de los sistemas anteriores de corriente directa (DC) establecidos por General Electric (GE).  En 1896, estas compañías unieron sus patentes y acordaron establecer la corriente alterna como el estándar en América.

     Dos patentes claves de Alexander Graham Bell en el telefóno, obtenidas en 1876 y 1877, sirvieron de base para formar la compañía American Telephone and Telegraph Company (AT&T), que Bell organizó en Massachusetts en 1877.  El telégrafo fue el primero artefacto eléctrico para comunicaciones.

Calculadoras Eléctricas

     En 1890, varias compañías electrificaron las calculadoras mecánicas y emperazon a añadir aditamentos de almacenamiento, la habilidad de manipular resultados almacenados, y la capacidad de imprimir los resultados en papel.

     La revolución industrial estaba en todo su apogeo durante este período y sus grandes logros descansaron en el uso de números.  Avances en prácticamente todas las áreas trajeron progreso al comercio, la transportación, la manufactura, y la construcción.  Estos avances también trajeron nuevos retos más complejos a la ingeniería.

     Los humanos realizaban estos complejos cómputos muy lentamente, y los resultados de estos cómputos eran muy a menudo incorrectos.  Las necesidades de la ingeniería y de la contabilidad crearon la búsqueda de una máquina que pudiera rápidamente realizar muchos cómputos con absoluta exactitud.  Algunos cómputos, como por ejemplo determinar el centro de gravedad de grandes estructuras, le tomaban meses a los humanos.

Máquinas Tabuladoras

     En 1890, Herman Hollerith, trabajando para el Negociado del Censo Estadounidense, desarrolló máquinas contadoras que podían leer información de estibas de tarjetas de papel que habían sido perforadas y entonces calcular los resultados de esta información sin la intervención humana.

     Presumiendo que las tarjetas habían sido perforadas correctamente por el operador humano en la perforadora de tarjetas, entonces la información podía ser leída con gran exactitud por la máquina contadora.  Esto fue especialmente importante para el U. S. Census Bureau que estaba enfrascado en el proceso de tabulación más grande jamás intentando hasta ese momento.

     Las tarjetas perforadas en sí eran duraderas y eran usadas como memoria permanente de información en cantidades virtualmente sin límite.  Datos diferentes se agrupaban en paquetes diferentes de tarjetas perforadas y alimentadas a la máquina calculadora según fuere necesario para resolver diferentes problemas.

La Era de la Tarjeta Perforada

     Estos artefactos electromecánicos que usaban electricidad para mover sus engranajes y ruedas, eran comúnmente llamados "sumadoras."  Los modelos más avanzados pronto tuvieron estaciones lectoras para la alimentación automática de las tarjetas perforadas.

     Las máquinas más sofisticadas de IBM y otros podían realizar operaciones como suma, multiplicación y ordenamiento, así como producir resultados en tarjetas perforadas.  Si nos dejamos llevar por los estádares modernos estas máquinas de tarjetas perforadas era lentísimas, típicamente procesaban entre 50 y 250 tarjetas por minutos, y cada tarjeta podía contener un máximo de 80 dígitos decimales.  Sin embargo, establecieron un método de entrada, salida, y almacenamiento en una forma flexible y a gran escala.

     Por más de 50 años desde que se comenzó el uso de máquinas calculadoras basadas en tarjetas perforadas, se continuaron usando para realizar los cómputos de los negocios mundialmente y la mayoría de los cómputos científicos y de ingeniería.


Última modificación : martes 2 de diciembre de 1997.


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